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México, una nación moderadamente próspera: columnista de Bloomberg

“México se ha convertido en una nación moderadamente próspera” y su economía es competitiva a nivel global, dice el columista Noah Smith de Bloomberg.

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El columnista Noah Smith publicó en el portal de Bloomberg un texto denominado “México es sólidamente de clase media (no importa lo que diga Trump)”, donde argumenta que muchos estadounidenses suelen pensar en México como un país empobrecido “con millones de personas desesperadas por huir hacia el norte. Pero esta imagen, destacada por el presidente Donald Trump, está desactualizada”.

El autor, quien fue profesor asistente de finanzas en la Stony Brook University, afirma que “México se ha convertido en una nación moderadamente próspera”, y busca demostrarlo con cifras y datos.

De acuerdo con Smith, a pesar de que el crecimiento de México en los últimos años ha sido más lento que en los años sesenta y setenta, el país ha seguido avanzando: “si bien México tiene mucha pobreza, el país en su conjunto ahora está firmemente dentro de los niveles de lo que el Banco Mundial llama países de ingresos medios altos. Después de ajustar la paridad del poder adquisitivo, según el Fondo Monetario Internacional, el ingreso per cápita de México en 2018 fue de aproximadamente $20,600 [dólares], justo por delante de Argentina. Y la desigualdad, aunque sigue siendo alta, está disminuyendo”, señala.

Un signo más de que la economía mexicana va por buen camino, explica Smith, es que a pesar de haber perdido los ingresos petroleros con los que contaba en el pasado, México ha tenido que buscar fuentes alternativas de ingresos.

A decir del analista, “México está manejando esta transición con habilidad. Ha aumentado más del doble del porcentaje de su producto interno bruto que gasta en educación desde la década de 1990, y su tasa de alfabetización ha aumentado a un máximo histórico del 94.9%”.

Smith retoma un informe de 2014 de Boston Consulting Group (BCG), para decir que nuestro país “también ha hecho un gran trabajo al mantener la competitividad de los costos de fabricación en los últimos años después de ser sorprendido por un aumento en la competencia china a principios de la década de 2000. Aunque los salarios manufactureros mexicanos han aumentado, los fuertes aumentos de productividad, los acuerdos comerciales y una depreciación moderada del peso han mantenido bajos los costos, incluso cuando la producción en China se ha vuelto más cara. A partir de 2018, BCG clasifica a México como el segundo destino de fabricación más competitivo, después de Indonesia”.

Pero eso no es todo, ya que “esta inversión, la mayor parte de la cual se destina a las industrias manufactureras, es tanto el resultado de las ganancias mexicanas de productividad como un facilitador de nuevas ganancias. Las compañías extranjeras que invierten en México, como Foxconn, General Motors y Samsung, traen tecnología avanzada al país”.

Otro dato interesante es que la mayor parte de las exportaciones mexicanas son productos manufacturados, y Smith subraya que “BCG informa que las exportaciones de productos electrónicos, tradicionalmente un pilar de las economías avanzadas, se triplicaron entre 2006 y 2013”. Por si fuera poco, la industria automotriz también es otro gran impulsor de la economía mexicana, pues “entre 2011 y 2018, las exportaciones de vehículos nuevos de México a los Estados Unidos aumentaron en 93%”.

La estabilidad de la industria y la economía mexicana ha dado como resultado que México sea hoy “un país de ingresos medios altos que se reestructura rápidamente para compensar la disminución de la riqueza de los recursos naturales”, dice Smith, quien agrega que esto explica “que el flujo de trabajadores de México a los Estados Unidos se haya revertido” desde 2007.

De acuerdo con Smith México debe enfrentar aún diversos retos como las altas tasas de criminalidad, impulsadas por la guerra contra las drogas, así como las brechas de desigualdad, por lo que recomienda que el país diversifique sus destinos de exportación “para que corra menos riesgo debido a una recesión en las relaciones comerciales con los Estados Unidos, y finalmente, necesita invertir en la creación de marcas reconocidas a nivel mundial, para que pueda capturar más valor de las cadenas de suministro de fabricación”.

“México todavía tiene una lucha cuesta arriba por delante. Pero el país está mucho mejor de lo que muchos creen”, concluye.